Hace un año y medio que una familia de Tío Pujio espera justicia

Los deudos de Luciano Pérez, el joven oriundo de Tío Pujio que murió en un siniestro vial, reclaman que se agrave la imputación del conductor que lo atropelló. La abogada querellante habló con El Diario sobre la causa que lleva un año y medio sin avances significativos

Hace un año y medio que una familia de Tío Pujio espera justicia
Hace un año y medio que una familia de Tío Pujio espera justicia

El 1 de mayo de 2022, a las 5 de la madrugada, se produjo un choque en el barrio Los Carolinos, en calle San Cayetano al 5000, un camino inter country de la ciudad de Córdoba. A consecuencia del impacto, un joven motociclista perdió la vida.

Al volante de una camioneta Amarok, iba Mario Nicolás Rivas. Según consta en la causa, el alcohol en sangre que midieron siete horas después del accidente porque, según dijeron, no tenían batería los alcoholímetros, era de 1,06 gramo de alcohol en sangre.

La víctima de ese choque fue el joven de Tío Pujio, Luciano Pérez, hijo de Mary Hurtado y Fernando Pérez. 

Luciano hizo su trayecto académico en el ramo de la electrónica en la UTN Regional Villa María. Durante la pandemia, decidió radicarse en Córdoba, para ganarse allí la vida como repartidor. En eso estaba, a bordo de su motocicleta, cuando recibió el impacto de la Amarok que venía a tal velocidad, según consta en la causa, que lo arrastró por más de 100 metros, causándole la muerte en forma inmediata.

 

La investigación

Marina Romano, la abogada que representa a la familia de Luciano Pérez -sus padres y su pequeño hijo de 10 años- dijo que los informes de los policías que intervinieron en el accidente dan cuenta de la modalidad del choque. “Lo embistió de atrás y lo arrastró 100 metros, lo que revela la alta velocidad”, dijo.

Esa versión, que está en los expedientes, fue confirmada por los peritos de control de la querella. Sin embargo, en la Fiscalía que recayó la investigación, a cargo de Jorgelina Gutiez, se ordenó una pericia mecánica que modificó el informe, indicando que la colisión fue frontal. “Se cambia la versión sin tener en cuenta los datos claves, como la posición y la alcoholemia”, señaló la letrada.

Frente a esto, las acciones de la querella fueron múltiples. Por un lado, pidieron un cambio de carátula, para que se investigue a Rivas como supuesto autor de “homicidio simple por dolo eventual”, una imputación que, en caso de condena, prevé penas mayores que el “homicidio culposo agravado”, delito por el cual está actualmente acusado.

También solicitaron la detención del conductor de la Amarok. “En Córdoba, cuando un conductor alcoholizado protagoniza un accidente grave, se lo detiene, según los casos, entre 15 y 60 días. En este caso no fue así, no solo que no estuvo un solo día apresado, sino que jamás lo inhibieron para conducir, pese a que también tiene multas por exceso de velocidad”, planteó. Ninguno de los pedidos tuvo respuesta.

“Es una causa muy particular”, señaló la abogada. “El mismo día del siniestro vial, dijo que era yerno de un ministro”, informó, al hacer referencia a que el acusado está casado con la hija de Walter Grahovac, actual titular de la cartera de Educación.

“No sé si es por motivos políticos, pero hay datos que llaman la atención, como por ejemplo, que recién lo llamaron a prestar declaración indagatoria el 24 de octubre de este año, es decir, un año y medio después del accidente”, señaló.

También advierte que a consecuencia del impacto, el airbag del conductor y del acompañante de la Amarok se activaron. “Sin embargo, en el expediente dice que iba solo”, cuestionó.

“Esta causa tuvo mucha repercusión que una asociación de prevención de accidentes denunció la demora en la investigación en esta causa ante la Fiscalía General, con esto te podés dar una idea de la preocupación que genera el hecho de que no se ocupen de un caso que causó la muerte de un joven”, dijo. “En representación de la familia de Luciano, esperamos que pronto podamos discutir este caso ante una Cámara del Crimen, donde podamos exponer todas las pruebas que tenemos ante un juez, para que después de escuchar las partes, dictamine si es inocente o culpable”, concluyó.¡

 

El criterio del Tribunal Superior

El Tribunal Superior de Justicia ratificó la posición de caratular como “homicidio simple por dolo eventual” una causa en que el siniestro vial, con consecuencias fatales, fue causado por un conductor en estado de ebriedad. Lo hizo en ocasión de rechazar el recurso de casación presentado por la defensa de Alan Alejandro Amoedo, condenado a 9 años de prisión al ser encontrado penalmente responsable de los delitos de "homicidio simple con dolo eventual" y de "lesiones graves con dolo eventual", por las muertes de Sol Viñolo y Agustín Burgos y por las heridas gravísimas sufridas por Fernanda Guardia en el siniestro vial conocido como la "Tragedia de la Circunvalación". Los defensores de Amoedo recurrieron al Tribunal para que cambiara la calificación a “homicidio culposo”, un delito excarcelable por el que está acusado el conductor que atropelló al joven de Tío Pujio.

En Villa María, el fiscal René Bosio elevó a juicio la causa por “homicidio simple por dolo eventual” contra Franco Acevedo, acusado de protagonizar un siniestro vial en la ruta 158, en el acceso a Arroyo Cabral, cuando conducía alcoholizado (1,23 gramo de alcohol en sangre). El choque fue el 20 de noviembre de 2022 y a consecuencia del impacto, murió Iara Medina, de 12 años; mientras que su hermana Morena, de 5, sufrió lesiones gravísimas. Cabe notar que este caso, que sucedió casi seis meses después que el que perdió la vida Luciano Pérez, ya está elevado a juicio; mientras que en la causa que tiene como acusado al yerno del ministro, recién lo llamaron a indagatoria.

Nota: El Diario del Centro - Villa María 

5/11/2023